En el año 1268, tras la muerte del Papa Clemente
IV, se reunió el cónclave de los cardenales en la ciudad italiana de Viterbo,
donde hubo que encerrar a los electores en el palacio episcopal. Después de
casi tres años de Sede Vacante sin que se llegase a ningún acuerdo sobre el
nuevo Pontífice, los desesperados habitantes decidieron no suministrar alimento
alguno a los cardenales, excepto pan y agua. Los príncipes de la Iglesia
debieron captar la indirecta, porque a partir de ese momento, se apresuraron a
elegir al nuevo Papa Gregorio X.
A
la vista de lo que está ocurriendo en este sufrido país tras el resultado
electoral del 20D, a esta Chinche se le ocurre que igual hay que hacer con los
Diputados, lo mismo que hicieron los ciudadanos de Viterbo en el siglo XIII con
los Cardenales: encerrarlos en el Congreso de los Diputados a pan y agua, y no
permitirlos salir hasta que consigan ponerse de acuerdo y pactar un gobierno.
En
el momento de escribir esta columna para el CARRIÓN, el asunto está más que
complicado, y existen más de un 99% de probabilidades de que los españoles
tengan que volver a votar el próximo día 26 de junio. La noche del día de las
elecciones, salieron a la palestra los dirigentes de todos los partidos
manifestando, muy convencidos ellos y ellas, que habían entendido lo que los
votantes habían dicho: se terminaron las mayorías absolutas, y hay que pactar
para formar gobierno. Pasados casi cuatro meses, parece que, o no lo habían
entendido y nos estaban chuleando, o lo habían entendido pero se les ha
olvidado con demasiada facilidad.
Los
intereses personales y de partido, las posiciones chulescas y prepotentes, las
líneas rojas y de otros colores, y las peleas internas de los partidos, han
prevalecido sobre el interés general de los españoles y los políticos de este
país se han pasado por el arco de triunfo el mensaje que decían haber entendido
el día 20 de diciembre. Así que, si dios no lo remedia, y no creo que ningún
dios esté para remediar estas cosas, el día 26 de junio habrá que volver a
votar. Y es muy posible que los votantes pasen la factura a los que crean
responsables de este desastre, bien cambiando su voto, bien quedándose en casa
ese día.
Estaremos
atentos.
Cimex lectularius
Publicado en CARRIÓN el 15.04.2016
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