La Chinche

En este blog se publicarán, con posterioridad a la publicación de la edición en papel, los contenidos de la columna que con el mismo nombre de La Chinche, aparecen quincenalmente en el periódico CARRIÓN.
Conocido vulgarmente como "chinche de las camas", y cuyo nombre científico es Cimex lectularius, la chinche es un insecto picador que se alimenta con la sangre de animales homeotermos (de sangre caliente). Su picadura no puede ser sentida inmediatamente por sus víctimas gracias a los anestésico y anticoagulantes que su saliva contiene. Solo horas después de la picadura comienzan a sentirse sus efectos.
Como la chinche, pretendemos picar sin que se sienta, en la política castellana y leonesa, palentina y española.

jueves, 17 de enero de 2013

¡Qué país!

O, ¡qué tropa!, que dijo Mariano Rajoy, refiriéndose a sus correligionarios.
La presidenta de Castilla La Mancha, doña Dolores de Cospedal, ha ganado el año pasado el doble que el Presidente del Gobierno de España, y para más escarnio, se la “olvida” consignar siete mil euros de nada en su declaración de bienes. Además, su esposo don Ignacio López del Hierro, utiliza los medios oficiales de la comunidad que gobierna doña Dolores para asuntos personales, y aparece como accionista en empresas que tienen intereses relacionados con la sanidad y el medio ambiente y que, según Greenpeace, han conseguido importantes y sustanciosas modificaciones en la futura Ley de Costas.
También relacionado con el nada despreciable negocio que se está abriendo con las privatizaciones en el campo de la sanidad pública, de las que son auténticos pioneros los gobiernos del PP en las distintas comunidades autónomas, aparece el ex consejo de Sanidad y en otro tiempo “niño favorito” de doña Esperanza Aguirre en la Comunidad de Madrid, don Juan José Güemes, que resulta ser consejero de la empresa Unilabs que, mire usted qué casualidad, ha comprado el 55% de las acciones de la empresa adjudicataria de la gestión de los análisis clínicos de seis hospitales madrileños, adjudicación que se produjo cuando el susodicho era Consejero de Sanidad. Por cierto, y para que mis lectores puedan situar mejor a este ejemplo de empresarios, su señora esposa es doña Andrea Fabra ¿Qué no les suena? Sí hombre, sí, la diputada del ¡Qué se jodan! soltado con la mayor pasión de la que era capaz mientras el Presidente anunciaba los recortes en las prestaciones por desempleo en el Congreso de los Diputados, e hija del ilustre don Carlos Fabra, ex presidente de la Diputación de Castellón, que sigue teniendo abiertas varias causas por corrupción en los tribunales y famoso por la construcción de un aeropuerto –el aeropuerto del abuelito– en el que se gastó 150 millones de euros, y en el que ni han aterrizado ni se espera que lo hagan en un futuro próximo avión alguno.
Y para remate de fiesta, y para que su expresión de ¡vaya tropa! siga teniendo cada vez más vigencia, el “cacique bueno” de Orense, como a él mismo le gustaba llamarse, ex presidente de la Diputación Provincial y padre del actual ocupante del mismo cargo, don José Luis Baltar, ha pedido la “baja temporal” como militante del PP al haber sido imputado por un delito de prevaricación continuada por haber colocado de forma totalmente irregular a 104 trabajadores de la institución provincial que presidía.
Pero no solo en el PP anida la corrupción. En estos días, los españolitos de a pie han contemplado con cara de asombro, por no decir de idiotas, la chapuza judicial con la que se ha cerrado y concluido el “caso Pallerols”, en el que Unión Democrática de Cataluña ha reconocido su financiación ilegal, y en el que mediante un acuerdo, y previo reintegro al erario público de las cantidades correspondientes, sus responsables directos han evitado la cárcel. Ahora bien, el colmo de la desfachatez ha llegado cuando el máximo dirigente de este partido, don Josep Antoni Durán i Lleida, que había prometido dimitir si algún día se demostraba que Unió se había financiado irregularmente, ahora dice que “dónde dije digo, digo Diego”.
Lo dicho ¡qué país, Miquelarena!

Cimex Lectularius

Publicado en CARRIÓN. 17.01.2013