Cuando el posible lector tenga en sus manos este
periódico, Palencia estará comenzando a celebrar sus ferias y fiestas de San
Antolín, y muchas otras localidades de nuestra región las habrán celebrado ya,
o estarán también a punto de celebrarlas.
En
esto de las fiestas, los humanos van a fecha fija. Celebradas unas, ya saben
cuándo se celebrarán las siguientes. Y así un año y otro.
Por
el contrario, con eso que llaman “la fiesta de la democracia”, últimamente
andan un poco despistados. Hasta hace poco tiempo, los Homo sapiens españoles sabían que poco después de celebradas unas
elecciones, y en algunos casos nada más celebrarse, se conocía el nombre del
Presidente de Gobierno. Pero con esto del fin del bipartidismo, llevan un año
en el que no saben a qué atenerse.
Tras las elecciones de finales
del año pasado, daba la sensación de que el chico guapo del PSOE, con la ayuda del
guapito de Ciudadanos y de la estrella mediática de Podemos, iban a mandar a
chiqueros al don Tancredo del PP. Pero al final, los personalismos de unos, y
los vetos y los egocentrismos de otros, dieron al traste con esa posibilidad, y
provocaron nuevas elecciones.
Celebradas estas con un
resultado similar, llevan los españoles casi dos meses sin saber si sigue el
mismo, viene uno nuevo o tienen que volver a votar antes de navidades.
Esta Chinche cada día entiende
menos a los humanos. Decían estar hartos del bipartidismo, y se lo cargan con
sus votos, dando lugar a un Parlamento mucho más fragmentado y diverso. Y
ahora, los representantes elegidos para resolver el entuerto, son incapaces de
hacerlo.
Dicen los tertulianos que hay un
candidato propuesto por el Rey, que llegó a un principio de acuerdo con el
cuarto partido en escaños, se fue de vacaciones y se dedicó a echar la culpa de que no pueda formar gobierno al
segundo partido más votado. Y mientras tanto, el otrora perejil de todas las
salsas y líder mediático del partido más prometedor del nuevo panorama
político, desaparecido.
En conclusión, los Sanantolines
los tenemos seguros, pero lo del nuevo Gobierno parece que va para largo. Una
se atrevería a hacer un pronóstico: para diciembre nuevas elecciones, y don
Tancredo mayoría absoluta. Estaremos atentos.
Cimex lectularius
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